En los estados de EEUU donde existe la pena capital, la demostración de una discapacidad intelectual puede eximir al preso de la ejecución, por lo que es de una gran importancia poder determinar si existe una limitación cognitiva acompañada de una afectación de las habilidades adaptativas. En el Journal of the American Academy of Psychiatry and the Law, Updegrove y Vaughn comentan un caso que se ha desarrollado a través de los últimos años en diferentes instancias judiciales y que señala que las habilidades adaptativas no deben juzgarse en función de la conducta del preso en el medio penitenciario, sino a partir de lo que ha sido su funcionamiento en la comunidad.